economia urbana

Los grandes proyectos urbanos parecen haberse convertido en práctica habitual de las ciudades europeas con el objetivo de mejorar su competitividad económica a nivel global.

Frente a la pregunta de cómo de beneficiosos resultan a nivel local para sus habitantes, nos hemos encontrado que la Comisión Europea planteó entre 1997 y 1999 la investigación Urban Redevelopment and Social Polarisation in the City URSPIC , en la que se analizaba si los grandes proyectos urbanos realizados en los últimos años en la Unión Europea daban lugar a exclusión y polarización social.

Estos grandes proyectos son ejemplo de la glocalización, ya que suelen partir, por un lado, de necesidades globales (flujos de inversión internacionales, dependencia del trabajo inmigrante, flujos transnacionales de información, redes de valor añadido o procesos de toma de decisiones supranacionales) pero, al mismo tiempo, se incorporan de manera absolutamente local, introduciendo valores y preferencias culturales a un área concreta de la ciudad que afectan directamente a sus habitantes (a través de sistemas de regulación ciudadana, modificaciones importantes en el mercado de trabajo…).

La investigación partía del análisis 13 grandes proyectos de regeneración urbana, estudiando las relaciones entre mecanismos globales de reestructuración global y los procesos de integración/exclusión locales, evaluando asimismo el impacto de las políticas públicas en las distintas escalas (locales, regionales y nacionales) con el objetivo de desarrollar un análisis transversal de estas dinámicas para los diferentes estados miembros de la Unión.

Las ciudades estudiadas comprendían diferentes niveles de importancia y población: clasificadas como «world cities» (ciudades con importancia global), se estudiaron los proyectos Kop Van Zuid (Rotterdam) y The South Bank Project (Londres). En la de Euro-city, los proyectos Adlershof (Berlín) y Espace Leopold (Bruselas). En cuanto a grandes ciudades, el proyecto Orestaden (Copenague), el de la Expo 98 (Lisboa), el International financial and services centre (Dublín), la Villa Olímpica (Atenas) y el International Center (Vienna). Y como ciudades secundarias, los proyectos de Abandoibarra (Bilbao), CBD (Birmingham), el Centro Direzionale (Nápoles) y Euralille (Lille).

Para conocer los resultados de este análisis, dirigido por Frank Moulaert, Erik Swyngedouw y Arantxa Rodríguez, tendrás que esperar al siguiente post.

Puedes leer más información sobre el tema en los documentos del estudio: abstract y urspicpres